Nos hemos dejado contaminar demasiado por este mundo... por qué tenemos que cambiar? endurecer nuestro corazón? no tiene sentido... es absurdo.
Con cada golpe de la vida, aprendemos a desconfiar más y más... perdemos la oportunidad de vivir plenamente, con cada rechazo, con cada sentimiento tóxico que sentimos.
No sería más fácil dejar de luchar contra nosotros mismos? no rendirse, si no simplemente ser como somos, sin importar lo que piensen, digan, o hagan los demás? tratar de no imponer nuestras ideas.
Quizás si no hubieran tantas etiquetas... encontraríamos amor en los demás, encontraríamos consuelo, calma, momentos felices... quizás si no nos complicaramos la vida... todo sería mejor.
Expulsa el dolor que sientas, sea en la forma que sea, mediante rabia, lágrimas... renueva tu mente y tu corazón... reúne fuerzas, y vuelve a empezar a andar por el camino que te marque el destino.
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