Ellos y ellas existen... rodeandonos con su dulzura, con su arrebatadora inocencia, con sus sentimientos puros... nos damos cuenta de quienes son? generalmente pasan desapercibidos... o son maltratados, discriminados de alguna forma.
Pero no les importa... no conocen la oscuridad que se cierne sobre este mundo, dan amor sin esperar nada a cambio... nos pueden enseñar muchas lecciones... pues son pura luz, y están aquí, entre nosotros, para enseñarnos el significado de la palabra amor, para que seamos mejores personas.
Yo tengo la suerte de tener a un ángel a mi lado, e incluso cuándo deje este mundo... sentiré que está a mi lado, en mi corazón... ella es la que me enseñó a amar de verdad, la que me enseñó la auténtica tolerancia, el respeto por los demás.
Quizás, gracias a ella, soy quien soy en ese sentido... una persona a la que no le importa amar, en todos los sentidos, aunque los demás no sientan lo mismo que yo... a mi me hace feliz, me llena ser así.
Y doy gracias cada día, por tenerla a mi lado, para que me siga demostrando, que la luz si merece la pena, y que es la energía más poderosa... en cualquier mundo.
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